Jesús es inicio y fin de todo

En este domingo, último del año litúrgico, la iglesia nos presenta la solemnidad de Jesucristo Rey del Universo.

Dentro de los diferentes aspectos de esta celebración se nos presenta a Jesús como principio y fin de todo lo que existe; el único por quien merece la pena darlo todo.

Para entender mejor el reinado de Jesús, que una que otra vez ha sido mal intrerpretado, es conveniente que al principio de este comentario nos centremos en la lectura de la parte del Evangelio de San Lucas que será proclamado en el día de hoy, pues en el mismo se nos presenta a Jesús crucificado, semideshidratado y siendo víctima de burlas de autoridades judías y militares; y al final encontramos la conversión de uno de los crucificados con Él.

Observando el relato antes mencionado podemos afirmar que la realeza de Jesús es la del amor, el servicio, la misericordia,el perdón y la compasión.

Esa respuesta dirigida a aquel que llamamos “el buen ladrón” supera la angustia de aquel hombre y nos deja a nosotros una puerta abierta antes las dificultades de nuestras vidas, ya que las actitudes de los dos malhechores refleja la postura de la humanidad ante la prueba y la muerte.

Nosotros participamos de la realeza de Cristo al ser consagrados en el bautismo.

Pero la misma, muchas veces no es comprendida por nosotros, pues nos resulta difícil entender que es en el calvario donde se revela en plenitud que Cristo es nuestro Rey y dueño de todas las cosas.

Ese comportamiento que confundió a autoridades, militares y hombres y mujeres del pueblo judío sigue confundiendo hoy a escritores, politicos, creadores de opinión, detentadores del poder y del dinero, gente de a pie y que se esconde tras tantos diseños de la educación, de la familia, de la cultura y de la sociedad actual.

Fuente: www.listindiario.com.do